"El arte es el siervo de la gnosis"

Desde la primera aparición conocida de los seres humanos el arte ha acompañado el ritual religioso. Los instrumentos musicales más antiguos tienen alrededor de 40.000 años, demostrando que ya existía una tradición musical bien establecida cuando los humanos modernos colonizaron Europa (al menos 30.000 años antes de la agricultura y 35.000 años antes de los primeros sistemas de escritura conocidos). Algunos de los instrumentos más antiguos fueron encontrados en las cuevas pintadas de los Pirineos franceses, que eran santuarios para los primeros rituales de iniciación conocidos. Estas cuevas-templo son la primera evidencia conocida de la capacidad del hombre para crear la Belleza y de su mayor aspiración.

Desde su aparición más temprana en las cuevas de templos prehistóricos, la música ha sido inseparable de los rituales más antiguos del mundo, tradiciones espirituales y escrituras sagradas. Los Vedas, las escrituras más antiguas del hinduismo, contienen himnos para el sacrificio y la alabanza. La música era una gran parte de los ritos religiosos y procesiones de los hebreos. En la edad de oro de la música y la poesía hebreas, el Templo de Salomón era la gran escuela de música, y era la tribu sagrada de Levi (los que llevan a cabo los deberes religiosos) que proporcionó música para la procesión del Arca de la Alianza . Los griegos utilizaban la música y la canción en el culto público de los dioses. Desde los primeros tiempos grabados, la música juega un papel central en los ritos religiosos, y el sacerdote-músico se encuentra en prácticamente todas las civilizaciones.

Fue a través de la música que la doctrina del alma inmortal fue introducida a la humanidad occidental. Fue introducido por el famoso poeta-músico Orfeo, quien lo recibió por iniciación de Hermes Trismegisto de Egipto. En los Misterios Eleusianos instituidos por Orfeo, la combinación de la música, la poesía y el drama utilizados en la recreación de los mitos sagrados fue tan estéticamente poderosa que produjo en los celebrantes todas las emociones y sensaciones internas que uno siente profundamente conmovido, e inspirado en una obra maestra del arte. Aristóteles dijo de los Misterios que "los iniciados no deben aprender nada, sino que deben ser afectados y puestos en un cierto estado de ánimo". Cuando los antiguos iniciados experimentaron la exaltación, el movimiento de algo invisible dentro de ellos les confirmó la existencia de el alma inmortal. Los celebrantes de los Misterios experimentaron una visión directa, personal, espiritual o gnosis.

El iniciático orfico Pitágoras estableció la música como una manifestación física de principios espirituales universales. La división del sonido en tono discreto representa esa dualidad gnóstica del Espíritu y de la Materia en las formas de Límite y Unlimitedness, respectivamente. El límite es el principio ordenante (espíritu), que actúa sobre la Unlimitedness (materia), del mismo modo que el número (ratios matemáticos) divide el continuo del sonido en los tonos de una escala musical.

El iniciado orfico Platón dijo que la caída de los atenienses comenzó cuando abandonaron las antiguas leyes musicales y empezaron a favorecer lo que atrajo el consumo de masas sobre la verdadera ciencia musical. Con el surgimiento del Imperio Romano, seguido por las invasiones bárbaras, las artes y las ciencias fueron destruidas, junto con los templos donde fueron enseñados. Incluso los principios básicos de la armonía, que Pitágoras había derivado de leyes inmutables de la naturaleza, fueron alterados por aquellos que silenciarían las poderosas canciones de Grecia. Pero en esa oscuridad de la Edad Media los trovadores ganaron el poder de la música. Durante tres siglos sus canciones inspiraron a la humanidad con un espíritu de caballería y amor.

La antigua tradición musical se revivió durante el Renacimiento italiano, cuando los restos de la antigua cultura griega se reunieron bajo la Casa de Medici. En Florencia, 1577-1582, un grupo de humanistas, músicos, poetas e intelectuales se reunió como la "Camerata Florentina" para discutir y orientar las tendencias en las artes, especialmente en la música y el teatro. Para restaurar el poder expresivo de la música, los principales filósofos del Renacimiento revivieron los principios de la música griega antigua que había estado completamente extinguida durante mil años. Su propósito era inspirar a la humanidad a la razón ya la auto-conciencia. Marsilio Ficino (llamado "el segundo Orfeo") era central en este movimiento, y fue a través de él que la doctrina de la inmortalidad del alma, que había sido descuidada por los teólogos cristianos, volvió a ser central al pensamiento religioso.

Hoy en día, L'Ordre de la Rose + Croix Esthétique du Temple y du Graal lleva adelante la tradición de que el arte juega un papel importante en la regeneración espiritual y sanación de la humanidad y que el arte declara la existencia de Dios y la inmortalidad del alma. Como Joséphin Péladan escribió:

"Artista, eres un sacerdote: el arte es el gran misterio y, cuando tu esfuerzo conduce a una obra maestra, un rayo de lo divino brilla como en un altar ... Artista, eres un mago. El arte es el gran milagro y prueba nuestra propia inmortalidad. "